¿Qué es el estrés?
Según define Sanitas, “El estrés puede definirse como un conjunto de reacciones fisiológicas que se presentan cuando una persona sufre un estado de tensión nerviosa, producto de diversas situaciones en el ámbito laboral o personal: exceso de trabajo, ansiedad, situaciones traumáticas que se hayan vivido, etc.”. El estrés nos prepara para atacar o huir.
Existen dos tipos de estrés:
– EUSTRÉS o “estrés bueno” que nos ayuda a mantenernos en acción y en alerta
– DISTRÉS o “estrés malo” cuando la situación desborda y está fuera del control de la persona.
Así mismo, la respuesta contraria al estrés es la relajación, el organismo debería regularse solo después de elementos estresores, de lo contrario puede aparecer ansiedad, irritabilidad, tristeza-depresión.
Síntomas del estrés
Podemos detectar que podemos tener un grado alto de estrés cuando notamos algunos de estos síntomas en distintos niveles como:
– Cognitivo: temor, inseguridad, miedo, pensamientos negativos, temor a perder el control, dificultad para pensar o concentrarse
– Fisiológico: sudoración, tensión muscular, palpitaciones, molestias en el estómago, dificultades respiratorias, dolores de cabeza, mareos, etc.
– Motor: comer, beber, fumar en exceso, intranquilidad motora, llorar, ir de un lado para otro sin una finalidad, etc.
Cuando estamos con un nivel elevado de estrés nuestro organismo segrega Cortisol, El cortisol realiza múltiples acciones y, a menudo, es clasificado como «hormona del estrés». Un nivel elevado de cortisol durante un tiempo prolongado es nocivo para nuestra salud
El estrés engorda
Ya sabemos que el estrés enlentece nuestro metabolismo y dificulta la generación de masa muscular
El apetito se desregula por el estrés porque altera principalmente dos hormonas que intervienen en la saciedad y en la sensación de hambre:
– El estrés generaría mayor grelina, la grelina es una hormona que estimula el apetito y participa en el metabolismo de grasas y azúcares. Además, llega a la sangre del cerebro y regula funciones asociadas con la gestión del nerviosismo. lo cual induciría más apetito.
– La leptina es una hormona que nos induce la saciedad después de haber comido. De esa manera, disminuye la sensación de apetito. A veces, cuando el organismo no se siente saciado después de comer puede ser consecuencia de que la leptina no ha alcanzado los niveles normales para que dejemos de comer.
Dormir poco, desajustes en los horarios de comidas, tomar poca fibra (abundante en verduras y legumbres) o el consumo de antidepresivos y ansiolíticos también pueden alterar estas hormonas.
¿Cómo gestionar el estrés?
¿CÓMO CONTROLAR EL ESTRÉS?
La forma más efectiva que tenemos para controlarlo es prestando atención a nuestra respiración y practicar técnicas de Meditación y Relajación.
Llevar una alimentación saludable y tomar los nutrientes necesarios también es muy importante para mantener a raya el estrés.
También, la lectura de estos libros, pueden interesarte:
“Técnicas de Relajación y Respiración”
“El monje que vendió su Ferrari”
“El poder del ahora”
Técnicas para evitar y gestionar el estrés
Las técnicas que mejor pueden ayudar a prevenir y a gestionar el estrés pueden ser:
– Respiración, por ejemplo, la técnica 4-8 o 3-6
– Meditación
– Caminar
– Ejercicio físico
Otras técnicas que pueden ayudar a rebajar el nivel de estrés son:
– Leer
– Manualidades
Aquí te dejo un audio para rebajar tu estrés ESCANER CORPORAL
